Dr. Michael Laitman Para cambiar el mundo cambia al hombre

La mala voluntad, literalmente, está quemando la tierra

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Foto: Llamas del incendio forestal de Ponto de Vilomara, 17/jul/22, vistas desde Sant Fruitós del Bages, Barcelona, ​​Cataluña, España.

La ola de calor actual en Europa está quemando la tierra y matando a sus residentes. Hasta ahora, según ABC News y otras fuentes, «sólo en España y Portugal ha habido más de mil muertes relacionadas con el calor», sin contar el número de muertos en Francia e Italia y se avecinan más a medida que la ola de calor avanza hacia el Reino Unido. Según los científicos, a menos que reduzcamos la emisión de gases de efecto invernadero, las olas de calor serán aún más calientes y frecuentes. Pueden hacerlo o no, pero de cualquier forma, nosotros somos quienes determinamos lo que sucede.

Necesitamos entender que, al  estar en la cima de la pirámide de la creación, todo lo que hacemos se filtra hacia abajo en la estructura. Cuando llega al fondo, cambia al nivel inanimado de la realidad, desde el que todo crece. Si tenemos mala voluntad, hay cambios negativos en el sistema y se manifiestan en eventos climáticos y geológicos cada vez más extremos.

En otras palabras, cuando las relaciones humanas se desequilibran, todo se desequilibra. Cuando nuestras relaciones se vuelven extremas, todo se vuelve extremo; cuando nos volvemos violentos, todo se vuelve violento. Cada verano, las ramificaciones del vínculo entre nuestras relaciones y nuestro mundo, son más extremas, hasta que reconozcamos que todo es un sistema jerárquico conectado y el que está en la cima determina el estado del sistema. No es que antes fuéramos mejores de lo que somos hoy. Es simplemente que éramos menos y había menos elementos que destilaran mala voluntad.

Además, en el pasado, las relaciones entre la gente eran menos tóxicas que en la actualidad. Si bien, hoy hay menos guerras, los niveles de sospecha y alienación entre la gente se están disparando, hasta el punto en el que ya no se puede confiar ni en la familia. Como resultado, las guerras entre países son más raras que nunca, pero las tasas de divorcio, la violencia doméstica y la violencia en la comunidad están en su punto más alto.

Incluso Internet, que supuestamente lo inventamos para conectarnos, se usa para abusar, engañar y explotar. La red mundial demuestra que todo lo que creamos, se vuelve contra nosotros. Cuando hay un elemento tan negativo en un sistema y ​​ese elemento está en la parte superior, ¿Cómo puede no estar mal todo el sistema?

Por eso, si queremos que el clima se enfríe, que baje el nivel del mar y que amainen las tormentas, debemos enfriar el fuego y calmar las tormentas entre nosotros. La preocupación y la responsabilidad mutua o al menos, saber que dependemos unos de otros, es necesario para restaurar el equilibrio en el mundo, en todos los niveles, desde el suelo que pisamos hasta el odio en nuestro corazón.

 

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Un comentario sobre “La mala voluntad, literalmente, está quemando la tierra
  1. Rosa María Lomeli Delgado dice:

    Muchas gracias por compartir. Ojalá llegara ese momento de restaurar el equilibrio. Efectivamente cada «invento» Solo es para causar más daño a la naturaleza, humanos,animales. Cada vez más contaminación en todos los aspectos. Dios los bendiga grandemente.

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