[El presidente francés, Emmanuel Macron felicita a Tedros Adhanom Ghebreyesus director general de la OMS, al final de la ceremonia militar anual del Día de la Bastilla en la Place de la Concorde en París, 14/jul/20. Ludovic Marin / Pool via Reuters]
Parece una buena idea. Pero en la práctica, no llevará a ninguna parte. Cheng señaló que «aunque los 25 signatarios pidieron ‘solidaridad’ y mayor ‘compromiso social’, no hubo indicios de que ningún país cambiaría pronto su enfoque para responder a la pandemia». Además, escribió que «China, Rusia y Estados Unidos no se unieron a la firma de la declaración». Y Jen Psaki, secretaria de prensa de la Casa Blanca, afirmó que el Tratado «podría desviar la atención de los problemas sustantivos con respecto a la respuesta de preparación a futuras amenazas pandémicas, «sellando así, la efectividad de su destino antes de que naciera.
Una vez más, la alienación evita que una iniciativa tenga éxito. Si cada país atiende sólo sus propios intereses, ¿Cómo podrán resolver cualquier problema global, especialmente cuando es tan generalizado como la COVID-19? Y como no pueden, están pagando el precio. Ya, Europa se enfrenta a una tercera ola, Brasil se está acercando a las 4,000 fatalidades Covid por día y en EUA, Rochelle Walensky, director de los centros de control de enfermedades (CDC) apasionadamente advirtió de una cuarta ola, dijo: «En este momento, estoy asustado … de la fatalidad inminente».
Nos acercamos a un punto de inflexión; tendremos que elegir entre solidaridad o dolor, gran dolor. La realidad nos dio un ultimátum y debemos elegir: seguir egoístas y sufrir o comenzar a pensar en los demás. Esta elección se manifestará en todos los niveles: internacional, nacional, social y personal. La solidaridad es el llamado del momento; si no lo hacemos voluntariamente, nos obligará y nos castigará. La naturaleza creó el virus; la naturaleza nos creó y nuestras innovaciones no se burlarán de la naturaleza, nuestro Creador.
El futuro puede parecer amenazador, pero creo que, de hecho, deberíamos agradecer que estemos viviendo un período de transformación. Estamos transitando de una sociedad egoísta a una humanidad conectada. Como ya sabemos la dirección, podemos elegir ir rápido y fácilmente o lento y dolorosamente. ¿Cuántas generaciones pueden decir que tuvieron un camino claro para toda la humanidad? Creo que tenemos suerte, pero debemos aprovechar la oportunidad y montar la ola. No deberíamos tener miedo. No hay necesidad de sufrir. Podemos tomarnos de las manos y construir un mundo donde la gente se preocupa por el otro, donde no hay pandemias ni guerra ni alienación. La elección es nuestra. Podemos tomarlo o dejarlo.
Buen día, muchas gracias 🌹 Dios los bendiga grandemente 🙏